Patrimonio rechaza el proyecto para el puente sobre el Burbia
La Comisión de Patrimonio de la Junta de Castilla y León no considera apropiado el proyecto que el Ayuntamiento de Villafranca del Bierzo ha presentado para mejorar la seguridad del puente y el viaducto sobre el Burbia, y por eso ha rechazado la propuesta. El equipo de Gobierno local pretendía colocar una plataforma de hormigón sobre el puente para ampliar el diámetro y construir un muro que sustituyera las actuales barandillas. Ello después de la movilización vecinal surgida a raíz del último accidente de tráfico, en el que perdió la vida un joven de 18 años tras caer al vacío a consecuencia de una placa de hielo sobre la calzada.
La obra pretendida por el Ayuntamiento «afecta sustancialmente a la morfología del puente», aseguró el jefe territorial de Patrimonio, Jesús Courel. Cualquier propuesta para mejorar la seguridad debe respetar el carácter histórico de esta infraestructura -que data del siglo XVIII-, una condición a la que no se ciñe el proyecto planteado. Courel explicó que ya existe una ampliación posterior a la construcción de este puente, por la cual se añadió un trozo a cada lado del mismo mediante la colocación de unas ménsulas sobre las que se apoyó una plataforma. «Ahora el consistorio planteba eliminar esa superficie y cambiar las ménsulas por muchas más para soportar una nueva plataforma. Esto supone la consolidación de un apósito y no es lo que queremos. Nosotros lo que pretendemos consolidar es su imagen primigenia», apuntó el jefe territorial de Patrimonio.
A lo que no se opone la Comisión es a la sustitución de las actuales barandillas por otras más fuertes y resistentes, siempre y cuando no sean opacas. Queda desechada por lo tanto la idea del muro. «El objetivo es no desvirtuar la imagen del puente, por ello, deben tener la transparencia suficiente, ya que estamos hablando de una infraestructura con un nivel patrimonial importante», argumentó Courel.
El Ayuntamiento se topa entonces con una confrontación de intereses preocupante. Por un lado, la carga rodada y peatonal que soporta diariamente el puente hace necesario su refuerzo, máxime teniendo en cuenta la gran cantidad de accidentes que se han producido. Por otro, Patrimonio obliga a respetar el carácter de joya histórica de esta infraestructura, como en su día lo hiciera también con el puente de Cacabelos. «Estudiaremos cualquier propuesta y ayudaremos al Ayuntamiento a encontrar una solución posible al problema», aseguró, no obstante, el responsable de Patrimonio, quien también explicó que «la plataforma del viaducto tiene problemas estructurales graves». Motivo por el cual -"aseguró-" el Gobierno local «deberá replantear el tráfico en esta zona». Así pues, «la solución planteada altera la fisionomía y va en detrimento del bien patrimonial».